miércoles, 27 de junio de 2012

ÚLTIMA LLAMADA

Reynaldo Mota Molina
La desesperación o la mala fe —o ambas cosas— del gobierno de Felipe Calderón Hinojosa ante la inminencia de los comicios para elegir al próximo presidente de México y la debacle de la candidata oficial, la panista Josefina Vázquez Mota, hicieron cometer una nueva pifia a la Secretaría de Marina al aprehender y presentar públicamente, con el despliegue mediático acostumbrado, al “presunto” hijo del Chapo Guzmán, decía una parte del comunicado oficial aunque en otra, afirmaba que el arraigado, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, era la persona de tal parentesco, a quien acusó de ser el coordinador de los cargamentos de cocaína y heroína del cártel de Sinaloa que lidera su padre hacia Estados Unidos, tras la acostumbrada siembra de armamento de alto poder, parque y fajos de billetes.   

Ni una cosa ni la otra; un vil fraude informativo presuntamente con el fin de dirigir la opinión pública a favor del PAN cuando más lo necesita. Menos de 24 horas les duró el teatro. El inculpado resulta ser Félix Beltrán León y su hermano Kevin Daniel Beltrán Ríos, acusados a su vez, de delincuencia organizada, lavado de dinero, posesión de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y delitos electorales, por lo que fueron arraigados por 40 días después de los cuales ni siquiera les dirán “usté” disculpe.  

¿Por qué la Secretaría de Marina presentó mediáticamente al “presunto” hijo del Chapo antes de comprobar genéticamente su identidad? ¿Se trataba de provocar una reacción del crimen organizado de tal magnitud que incendiara al país y sirviera de pretexto para suspender los comicios del 1 de julio? ¿Por qué la DEA, la Embajada de Estados Unidos y la Secretaría de Marina, se tiran la bolita de la tremenda pifia? ¿Por qué Felipe Calderón guarda silencio?

En esta semana vence el término del arraigo de militares de alto rango encabezado por el general en retiro Tomás Ángeles Dauahare, cercano al priista Enrique Peña Nieto, que es otro elemento de sospechosismo electoral. ¿Qué va a pasar? ¿Prologarán el arraigo o le dirán el consabido “usté” dispense? ¿Y…?

Esta semana están por acontecer eventos previos a las elecciones del 1 de julio que serán definitorios: Ante la evidente caída de Josefina, Felipe Calderón, Vicente Fox y poderes fácticos que los acompañan han arriado banderas en favor de Peña Nieto con quien han negociado impunidad a cambio del  voto panista. ¿En qué momento va a declinar Josefina Vázquez Mota?

El viejo sistema del PRI, es decir el de siempre, en contubernio con el IFE y con el gobierno calderonista tiene todo en su mano para consumar un nuevo fraude electoral, desde las confusas boletas y la falta de información para emitir el voto correctamente sin riesgo de que sea anulado o “mal interpretado”, la duplicidad de boletas electorales, el voto en el extranjero que nadie sabe ni cómo ni quién lo controla confiablemente, hasta el apuntalamiento mediático de Televisa y Tv Azteca, “agradecidas” por el monopolio concedido de la telefonía móvil.

Elba Esther espera el momento oportuno para ordenar a Quadri la declinación también a favor de Peña Nieto con quien el asunto está arreglado.

¿En qué dirección moverán estos vientos el estado de ánimo de Andrés Manuel López Obrador? ¿Amoroso o beligerante?

Estas serán las elecciones en la historia de México, más vigiladas y observadas por propios y extranjeros. Esperamos que valga la pena. Que el riesgo del fraude electoral —que es muy amplio— se imposibilite verdaderamente por la participación ciudadana incluyendo al Movimiento #YoSoy132.

Corresponde a usted, a mí y a cada uno de los votantes, emitir el voto responsable. Analizar y razonar ¿qué nos dejó el PRI con más de 70 años de “dictadura perfecta”? ¿Querer vivirla otra vez? ¿Qué nos deja el PAN con 12 años de hecatombe? ¿Darle oportunidad a Andrés Manuel para ver si de veras es el bueno? ¿Anular el voto? ¿No acudir a votar? Es lo menos apropiado porque nos priva del derecho de reclamar aquello con lo que no estamos de acuerdo.

¡Por su voto razonado!

No hay comentarios:

Publicar un comentario