A fin de cuentas el debate sobre los debates de los candidatos a la presidencia de la República terminó en que sólo se realizarán dos, organizados por el IFE, siendo el primero de ellos, el sábado 5 de mayo dentro del corto período de campañas que concluirá al mes siguiente. Ciertamente los medios de cualquier índole pueden organizar otros, siempre que no se cobren, sean equitativos, y que los candidatos acepten, lo cual está por verse…
La confusión en que se desarrolló la controversia para llegar al punto mencionado orquestada por Televisa y el propio IFE, dejan entrever el control que ejercen para no exponer a la crítica pública a Enrique Peña Nieto ante las evidentes limitaciones que tiene en formación política, intelectual, cultural, histórica y de comunicación, entre otras.
Se pensaba que Josefina Vázquez Mota también estaba protegida pero una vez soltada, solita se metió en la cristalería como la chiva del cuento, ocasionando tales destrozos que ahora Felipe Calderón mete sus “manos limpias” para controlar los daños. Era previsible; sólo era cuestión de esperar…
Ambos casos demuestran, una vez más, que dichos personajes no son más que las figuras representativas del PRI y del PAN —sólo eso— pero que los verdaderos detentadores del poder están ocultos detrás de dichas imágenes públicas y son quienes manipulan sus movimientos, voces y pensamientos, y que seguirán siendo quienes ejerzan el poder y la toma de decisiones una vez que la figura decorativa sea llevada a la silla presidencial.
Por eso Peña Nieto es incapaz de decir algo acertado fuera del cartabón y requiere del apuntador electrónico hasta para tomar su Protesta, más aún, para participar en un debate abierto, profesional y objetivo donde tenga que abordar los complejos temas del México de hoy, sus soluciones, sus perspectivas, y mostrar sus dotes de líder y gobernante… de las que obviamente carece.
Vázquez Mota está en el principio de su fin como candidata —tal vez antes de lo esperado— y la gente de Calderón —muchos de la peor calaña— toman posiciones para ayudar a salvar el hueso o bien para consolidar la alianza PRI-AN una vez más, en contra de Andrés Manuel López Obrador quien, hay que decirlo, es el único que ha tomado en serio su papel de candidato y esgrime argumentos viables para revertir la problemática nacional y ha mostrado al gabinete, integrado con gente de reconocido prestigio, con el que promete gobernar por el bien común sin desligarse de la clase del poder económico.
Esta será la mejor oportunidad para que usted y yo ejerzamos razonadamente nuestro voto.
¿Qué dice usted?
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