La “guerra” de Felipe Calderón Hinojosa contra el narcotráfico parece haber tomado el cauce de aniquilación de la juventud y con ello la eliminación de un futuro promisorio para la nación mexicana que en pocos años más estará convertida en un país de viejos, sin opciones de relevo de ideas, energía, vitalidad, inteligencia ni decisión de luchar por una vida mejor. Por eso su gobierno tiene truncos la educación y el desarrollo intelectual.
La propuesta del gobernador de Chihuahua, César Duarte Jáquez, de reclutar “ninis” —jóvenes que ni estudian ni trabajan— mediante el servicio militar obligatorio establecido, de continuar durante tres años más para tener oportunidades de empleo y capacitación, suena engañoso, porque de acuerdo con las condiciones de su estado donde se ubica la ciudad más violenta del mundo como lo es Ciudad Juárez, 
remite a un plan macabro de alimentar la carne de cañón de esta estúpida guerra que lo que hace es entrañar jóvenes delincuentes como Edgar, el “ponchis” y Rosalío Reta, convertidos en “niños “sicarios” desde los 11 y 13 años, que el crimen organizado se encarga de formar como delincuentes.
remite a un plan macabro de alimentar la carne de cañón de esta estúpida guerra que lo que hace es entrañar jóvenes delincuentes como Edgar, el “ponchis” y Rosalío Reta, convertidos en “niños “sicarios” desde los 11 y 13 años, que el crimen organizado se encarga de formar como delincuentes. La propuesta es perversa porque en lugar de plantear una política de Estado eficaz que brinde a los jóvenes en estas condiciones protección social, educación y oportunidades de desarrollo que los aleje efectivamente de las drogas, de los grupos delincuenciales y de los riesgos que implica vivir en las calles, propone la rigidez de la disciplina militar como si ésta fuera garante de una mejor calidad humana.
Según datos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 2010, existen en el país 7 millones y medio de “ninis”. ¿Creerá el gobernador Duarte que es carne suficiente para esta guerra? ¿Estará tomando en cuenta para su proyecto que de cada 10 niños mexicanos 4 viven en condiciones de pobreza? ¿Que el total de niños pobres del país asciende a 15.8 millones, de los cuales 4.3 sobreviven en pobreza extrema?, según investigaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
¿Saciará así su ineptitud? ¿Qué límites tiene la estupidez de los políticos?
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