Por Lic. Reynaldo Mota Molina
Para los políticos y los partidos políticos no hay crisis, es más, estamos en jauja; ¿no ve usted cómo el Congreso y el IFE distribuyen generosamente más de 3 mil 633 millones de pesos entre los partidos para gastos electorales financiados con dinero público, es decir, el dinero de usted y el mío, todo para simular que vivimos en un “sistema democrático”?
Para los políticos y los partidos políticos no hay crisis, es más, estamos en jauja; ¿no ve usted cómo el Congreso y el IFE distribuyen generosamente más de 3 mil 633 millones de pesos entre los partidos para gastos electorales financiados con dinero público, es decir, el dinero de usted y el mío, todo para simular que vivimos en un “sistema democrático”?
De este suculento pastel el PAN recibe una rebanada de MIL 9.9 millones de pesos; el PRI, 706.5 millones; PRD, 607.1 millones; PVEM, 304 millones; PT, 287.9 millones, Convergencia, 272.2 millones; Nueva Alianza, 255.1 millones y PSD, 189.9 millones, para cubrir el gasto ordinario, el de campaña y “actividades específicas”, es decir, para sus chuchulucos y demás...
La gran pregunta o inocentada, como prefiera usted: Si estamos en plena crisis económica ¿por qué no se aplica este dinero a proyectos productivos entre la población más necesitada para paliar, cuando menos, una parte del problema, y nos dejamos de una vez por todas de gastos suntuarios e inútiles…?
Pero es por demás. El duopolio Televisa-TV Azteca, por ejemplo —mal ejemplo—, no está dispuesto a perder un gramo del pastel y arrebata lo que sabe es suyo incluyendo al gobierno calderonista, pasa por encima de todos y en plenas transmisiones de los partidos de fútbol soccer y americano las interrumpe en los momentos culminantes, sin el menor respeto al televidente, para transmitir los spots ordenados por el IFE, aplicando de esta forma prepotente y abuso de poder fáctico, presión para que la llamada Ley Televisa se imponga tal y como ellos quieren. ¿El IFE, La Secretaría de Comunicaciones (SCT) y el Congreso?, doblegados como siempre.
Pero la crisis no es solamente económica sino de visión de Estado. Felipe Calderón fue a Davos, Suiza, a turistear y además, a presentar ante el Foro Económico Mundial la “genial” idea de establecer Fobaproas para sortear la debacle internacional —al fin y al cabo el pueblo paga—. Dijo: “Es absolutamente importante y urgente, además, ahorrar o limpiar el sistema bancario, ya lo hicimos hace diez años en México; nos costó 15 o 20 puntos del PIB, pero hoy en día nuestro sistema bancario es realmente sano”. Aunque el pueblo esté en la mayor pobreza y el país en recesión, le faltó decir.
Otra visión equivocada: ¿Por qué ir a Davos en el momento en que allí el neoliberalismo vive los últimos estertores de su agonía ante el fracaso de su modelo económico? Prueba de ello es la ausencia del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y otros mandatarios del “primer mundo”. En cambio, menosprecia el Foro Social Mundial en Brasil (FSM) en donde se reúnen mandatarios latinoamericanos, más cercanos a nuestra problemática, para analizar nuevas vías de organización y sistemas más justos que repercutan en una mejor calidad de vida para la sociedad.
Otra más: Felipe Calderón corrió presuroso a entrevistarse con Barack Obama antes de que éste recibiera la investidura presidencial a ofrecer una "alianza estratégica" entre ambos países en materia de seguridad y asegurar la vigencia del Plan Mérida a cambio de nada. Nada en favor de los derechos de los inmigrantes mexicanos ni de apoyos para salir de la crisis económica. Recibió, eso sí, palmaditas cordiales obligadas.
(Para ampliar dar clic en la imagen)
La visión de Estado no es algo que se les de a los gobiernos panistas; sólo atienden sus intereses, son egoístas e irresponsables. ¿Mayor muestra? ¡Vicente Fox! en la reunión que tuvo con alcaldes panistas en la cual los exhortó a que salgan a hacer campaña a favor de sus candidatos y a dejar encargado el changarro, como él lo hizo con la presidencia de la República, durante los seis años de su gobierno… El sólo reproducir ésto me causa náusea por la indignación. Usted perdone.
No hay comentarios:
Publicar un comentario